La importancia de ser autodidacta

Con seguridad has escuchado el término autodidacta. ¿Sabes lo que significa? ¿Te consideras uno? ¿Cuál será la importancia de autodidacta en esta era de la información?. En este post abordaremos porque ser autodidacta en los tiempos actuales es un requisito de sobrevivencia.  

Una de las actividades humanas que más ha sufrido cambios en los últimos años es justamente la forma como aprendemos. El desarrollo de la tecnología y el internet han permitido democratizar el acceso a la información. Actualmente, podemos afirmar que prácticamente todos cargamos una «Biblioteca de Alejandría» en nuestros bolsillos. 

Sin embargo, tener la información a disposición no es suficiente para garantizar aprendizaje y conocimiento. Pues necesitamos pasar por el proceso de desarrollo intelectual y natural de aprendizaje. Si bien podemos afirmar que la forma como aprendemos ha cambiado. Actualmente tenemos más recursos a disposición que nos ayudan a aprender de forma más lúdica. Por otro lado el proceso de adquisición y retención de conocimiento continúa siendo el mismo. 

Como seres humanos necesitamos de estímulos, de inputs de datos e información. Estos necesitan ser almacenados, relacionados y asociados entre ellos para que sean considerados conocimientos.   

Ser autodidacta significa tener la capacidad de pasar por ese proceso de aprendizaje de forma autónoma e independiente. Dicho de otro modo el autodidacta es una persona que aprende sola sobre algún asunto o que desarrolla alguna habilidad o competencia por cuenta propia. 

Tips importantes de un buen autodidacta

Vamos a ver una lista consejos o tips que consideramos importantes para desarrollar esa habilidad de ser autodidacta y lo más importante: sacar provecho de ello. 

1. Capacidad de aprender rápido

Muchos asocian la capacidad de aprender rápido a la inteligencia. De hecho hay personas que tienen un talento natural y consiguen aprender más rápido que otros. Sin embargo, la capacidad de aprender rápido es una habilidad que los humanos podemos desarrollar a medida que nos exponemos a nuevos conocimientos y desafíos. Por ejemplo, las personas que dominan más de un idioma, les es más fácil aprender otros idiomas.

Esto sucede por el simple hecho que un autodidacta se preocupa por dominar el proceso de aprendizaje y por desarrollar la habilidad de “aprender a aprender”. Este punto es una falencia en los sistemas educativos de nuestra región. Principalmente en las escuelas no se preocupan para que los niños y adolescentes gusten del proceso de aprendizaje y que desarrollen la habilidad de “aprender a aprender”. 

2. Ser curiosos e inquietos

Para desarrollar nuestra capacidad para aprender rápido necesitamos ser curiosos e inquietos. No debemos conformarnos con los que ya sabemos o entendemos. Un buen autodidacta tiene una sed infinita por conocimiento ya que en la actualidad nuestro mundo está cambiando tan rápido que si no acompañamos esa evolución podemos quedarnos rezagados.

3. Buscar asuntos de interés

Este punto es super importante ya que solo si encontramos asuntos que sean de nuestro interés vamos a despertar nuestra curiosidad y así también a medida que nos adentramos más en el tema vamos a desarrollar nuestra capacidad de aprender rápido. Muchas materias del colegio o de la universidad no las aprendemos correctamente simplemente porque no despiertan nuestro interés y no hay nada más desmotivador que intentar aprender algo que no nos gusta. Gracias al internet tenemos acceso a opciones infinitas de tópicos y temas, en los más variados formatos (blogs, videos, cursos, podcasts, juegos, etc), es cuestión de explorar un poco.  

4. Expandir nuestros conocimientos y horizontes 

Este punto puede parecer contradictorio con el anterior. Sin embargo, no lo es. Ya que normalmente todos tenemos más de un asunto de interés que nos llama la atención. Un buen autodidacta expande sus conocimientos y horizontes aprendiendo o desarrollando competencias que quizás no tienen mucha relación con su profesión. Pero que si ayudan al desarrollo cognitivo y holístico de una persona. Por ejemplo, una persona que trabaja con tecnología pero que le gusta la cocina puede desarrollar sus habilidades culinarias aprendiendo y haciendo diferentes recetas que encuentra en el internet. O un médico o abogado que le gusta la música puede aprender a tocar un nuevo instrumento sin necesidad de dedicarse o vivir de la música.

Estos aprendizajes de actividades que no necesariamente están relacionadas a nuestra profesión nos ayudan por un lado a combatir el estrés y por otro también desarrollamos nuestra capacidad de aprender.

5. Debemos responsabilizarnos por nuestro aprendizaje

Un buen autodidacta se responsabiliza por su aprendizaje. No terceriza su desarrollo intelectual y profesional. Aunque aún dependemos de la formación que se nos da en el colegio y en la universidad, y sobre la cual no gozamos de mucha libertad para escoger, adaptar o personalizar. Ya en el ámbito profesional ese escenario está cambiando.

Actualmente las empresas ya no son más responsables directas por el desarrollo profesional e intelectual de sus colaboradores. Las iniciativas como programas de capacitación patrocinados por empresas seguirán existiendo, solo que en mi opinión en menor medida. En la actualidad cabe a cada uno de nosotros ir atrás del conocimiento, de prepararnos mejor, de capacitarnos en diferentes tecnologías y de evolucionar profesionalmente. Importante ser conscientes que seremos remunerados en proporción a la cantidad de valor que aportamos o generamos en una organización.

6. Ser organizados y cultivar buenos hábitos 

Todo en la vida es cuestión de hábitos. Los humanos no somos más que una serie de rutinas que ejecutamos cada cierto tiempo. Y eso no tiene nada de malo, no significa que somos robots. Significa que si dominamos el Ciclo del Hábito vamos a tener la capacidad de desarrollar las habilidades que necesitamos para cumplir nuestros objetivos de aprendizaje. Ser organizados es crucial a la hora de estudiar y aprender. Solo recuerda cuando vamos al colegio, lo hacemos porque tenemos hora marcada y esa actividad es parte de nuestra agenda. Un buen autodidacta hace exactamente eso, reserva horas y días de su agenda para estudiar y lo más importante las cumple.  

7. Aprovechar la tecnología

En este mundo de la información y conectividad nuestro mejor aliado de estudio y aprendizaje es la tecnología. A través de ella nuestro proceso de aprendizaje se vuelve más lúdico y fácil. Con seguridad ya has aprendido algo o has resuelto un problema con ayuda de un vídeo de Youtube. Millones de personas actualmente aprenden por ese medio en los más diversos campos y áreas, ya sea programación, medicina, derecho, historia, geografía, economía, etc. Otro ejemplo claro de cómo la tecnología está ayudando en el proceso de aprendizaje es el proceso de Gamificación, a través del cual, se usan técnicas, elementos y dinámicas propias de los juegos con el fin de potenciar la motivación y acelerar el proceso de aprendizaje. 

8. Seguir referencias o mentores

Si bien como lo dijimos al principio que un autodidacta es aquel que tiene la capacidad de aprender de forma autónoma o por cuenta propia. Eso no significa que no pueda seguir referencias o mentores. Para cualquier cosa en la vida necesitamos de referencias ya que nos marcan un norte y nos ayudan a no perdernos en medio del camino. Por ejemplo podemos seguir o tomar como ejemplo a grandes autodidactas de nuestra historia como Thomas Alva Edison, Leonardo da Vinci, Albert Einstein, entre muchos otros.

Por otro lado, la mentoría puede ayudarnos a acelerar el proceso de aprendizaje ya que un mentor puede mostrarnos atajos que caso vayamos solo sería difícil o imposible encontrarlos. De igual manera un mentor también puede colaborarnos con la curaduría de contenido ya que es muy fácil perderse con la cantidad exhorbitante de información que hay a disposición.  

Conclusión 

En el post de las Habilidades del Futuro vimos que usar nuestra “Inteligencia Aprendedora” es vital y primordial. Actualmente necesitamos estar en un constante proceso de aprendizaje y desarrollo ya que nuestro mundo se está volviendo cada vez más cambiante, complejo y conectado. 

Podemos concluir que ser autodidacta es usar esa Inteligencia Aprendedora a nuestro favor siendo curiosos y sedientos de conocimientos. Igualmente para hacer más interesante y motivador el proceso de aprendizaje recomendamos buscar asuntos o tópicos que sean de nuestro interés, pero sin olvidar de intentar expandir nuestros horizontes.

Recuerda también que actualmente cada quien es responsable por su desarrollo profesional e intelectual, no “tercerices” aquello, asume el control y el mando. Otro aspecto importante es ser organizados con nuestros estudios, como buenos autodidactas debemos hacer del estudio y aprendizaje un hábito. Para finalizar usemos la tecnología a nuestro favor y nos apoyemos en mentores y referencias para acelerar el proceso de aprendizaje. 

Espero que este post haya sido de tu agrado. Te sugiero seguir estos 8 tips y con seguridad tu capacidad de aprendizaje será potencializada. Solo recuerda que ser autodidacta en la actualidad es una cuestión de sobrevivencia. Para ayudar a otros a desarrollar sus habilidades como autodidacta solo necesitas compartir este mensaje. Déjanos tu opinión y participa de la comunidad de “Como No Supe Antes” a través de nuestra redes sociales.