8 Lecciones financieras que nos deja la crisis del coronavirus

Publicado por Christian Velasco en

La pandemia del coronavirus no solo ha generado una crisis sanitaria de escala global, sino también estamos viviendo la peor crisis económica por ahora registrada en este siglo XXI. En medio de tanta incertidumbre de cómo será nuestro mundo post-coronavirus, podemos tener la certeza que esta crisis nos deja muchos aprendizajes y principalmente lecciones financieras que debemos preocuparnos por aplicar de aquí en adelante.

Si durante la pandemia tuviste la suerte de mantener tu trabajo o tus fuentes de ingresos, agradece, pues formas parte de un pequeño y selecto grupo. Ya que la gran mayoría de la población se ha visto impactada financieramente por la crisis.

Pero como dice el refrán “Ningún mar en calma hizo experto a un marinero”. Así que esperamos que todos salgamos con lecciones aprendidas y más fortalecidos con todo esto que estamos viviendo. 

Justamente en este artículo queremos hablar sobre esos aprendizajes que la crisis nos está dejando. Hemos seleccionado ocho lecciones financieras que creemos que son importante destacar y podríamos aplicar en nuestras finanzas y en nuestras vidas de aquí en adelante

1. Tener una reserva de emergencia es fundamental

Iniciamos nuestra lista de lecciones financieras que la crisis del coronavirus nos deja con la Reserva de Emergencia. Como su nombre lo indica es un fondo que sirve para salvarnos de imprevistos o situaciones complicadas que nadie está exento de atravesar. Tenemos un post previo que habla sobre la importancia de tener una reserva de emergencia y cómo ésta puede prevenir que caigamos en una ruina financiera. 

Importante destacar que lo aconsejable es tener un fondo que nos permita cubrir nuestros costos de vida de 3 a 6 meses. Cuanto más mejor. Este fondo de emergencia tiene que estar aplicado en un vehículo de inversión que tenga liquidez, o sea que sea fácil de sacar y ocupar caso necesario. Inversiones en renta fija con riesgo bajo son los ideales para nuestro fondo de emergencia. 

2. No depender de una sola fuente de ingresos

Depender de una sola fuente de ingresos es casi tan riesgoso como no tener una reserva de emergencia. Es importante que tengamos fuentes de ingresos alternativas y mucho mejor si no dependen de nuestro tiempo o que requieran de una dedicación mínima de horas a la semana. 

La mejor forma de generar ingresos extras es tener una renta pasiva de nuestras inversiones. Ya hemos hablado sobre las formas más comunes de inversión. Sin duda alguna, ese es el mejor camino y la clave no sólo para atravesar una crisis sino para alcanzar la libertad financiera. No está demás decir que cuanto antes comencemos a invertir, con mayor anticipación vamos a poder cosechar los frutos y beneficios de nuestras inversiones. 

Ahora, si tú posición actual es que aún no has comenzado a invertir y tu fuente de ingresos principal no alcanza para ahorrar y cubrir tus costos de vida. Lo aconsejable es que deberías generar ingresos extras haciendo diferentes actividades. 

3. Ahorro, el mejor hábito financiero que podemos cultivar

Ahorrar es el mejor hábito financiero que podemos cultivar y aplicar en nuestras vidas. Crear el hábito del ahorro es una de las lecciones financieras más valiosas que podemos extraer de esta crisis. La única forma de construir una reserva de emergencia y posteriormente comenzar a invertir es ahorrando. 

Y ahorrar no es nada más que hacer que nuestros egresos sean menores que nuestros ingresos. Una buena práctica es alterar el orden de las variables en la fórmula clásica del ahorro. De esta forma tendremos una fórmula mejorada que nos permitirá ahorrar.

Lo vemos a continuación:

Fórmula clásica: Ingresos – Gastos = Ahorro 

Fórmula mejorada: Ingresos – Ahorro = Gastos 

O sea si priorizamos el ahorro, vamos a gastar solo lo que sobra después de haber ahorrado. En contrapartida, con la fórmula clásica sólo ahorramos lo que sobra después de los gastos, y normalmente esa diferencia entre ingresos menos gastos tiende a cero. 

4. Bienes inmuebles son activos con mucho valor 

Tener un techo donde vivir es sin duda una necesidad básica que todos queremos cubrir. En época de crisis un aspecto fundamental de las lecciones financieras puede ser el no tener el costo fijo de un alquiler.

Es importante destacar que hay una serie de factores para analizar a la hora de invertir en inmuebles así como lo vimos en el post sobre estratégias de Bienes Raíces

Normalmente la inversión en un bien inmueble requiere un préstamo bancario. Por lo tanto, tendríamos una hipoteca y una responsabilidad financiera que cubrir. Sin embargo, destacamos que los bienes inmuebles son activos importantes ya que normalmente tienden a valorizarse con el tiempo incluso en época de crisis. 

Un aspecto para considerar es no cometer el error de endeudarnos con una casa mucho mayor de la que necesitamos o fuera de nuestras capacidades. Así como lo vimos en Cómo no supe antes de comprar mi primera casa es importante analizar fríamente y no dejarnos llevar por la emoción.

Otro aspecto que debemos tomar en cuenta son factores macroeconómicos de la región donde queremos comprar el inmueble. Hay ciudades o países donde adquirir una casa o departamento realmente no es una buena inversión debido a los precios inflados de los inmuebles, impuestos elevados  y/o a las malas condiciones crediticias. 

5. Es importante no estar endeudados 

Este punto parece contradictorio con el anterior y hasta existe una frase popular que dice “El que no adquiere una deuda nunca consigue nada”. Lo que necesitamos hacer es escoger cuidadosamente nuestras deudas.

Así como lo vimos en cómo no supe antes de comprar mi primer auto, no debemos endeudarnos por bienes perecederos que pierden valor con el tiempo, como es el caso de los vehículos. De la misma manera, debemos cuidar de no endeudarnos por bienes de consumo o actividades de placer. Esas compras parecen inofensivas pero muchas veces acabamos comprometiendo nuestra tarjeta de crédito a largo.

Normalmente cuando adquirimos una deuda hacemos nuestra simulación de pagos con el mejor escenario posible. Es decir, consideramos un escenario optimista en relación a nuestros ingresos. De esta forma, cuando la crisis llega, nos encontramos “mal parados” y comprometidos financieramente.

Una buena práctica a la hora de analizar un préstamo es simular escenarios pesimistas. Debemos preguntarnos ¿qué pasa si todo lo planificado no sale como esperamos?.

Otro consejo muy importante que hace parte de las lecciones financieras y nos puede ayudar a atravesar crisis es intentar pagar nuestras deudas lo antes posible, amortizar el capital de la deuda con anticipación

6. Es posible vivir con menos

En esta época, si hay algo que descubrimos todas las personas o la gran mayoría es que conseguimos vivir con menos. La pandemia nos obligó ya sea de forma consciente o de forma inconsciente a ahorrar. Aprendimos a cuidar más de nuestro dinero ya que muchos vimos que las crisis pueden disminuir o eliminar drásticamente nuestros ingresos. 

Durante la pandemia aprendimos a comer más en casa, a ser menos consumistas, muchos de nosotros conseguimos ahorrar en costos de transporte con la posibilidad de trabajar o estudiar remotamente.

Todas estas acciones son actitudes que debemos intentar mantener post-pandemia ya que vimos que sí es posible vivir una vida más austera, con mayor frugalidad, y eso no necesariamente significa tener una vida mala o infeliz.   

7. Debemos ser resilientes y vivir en constante aprendizaje

En las cinco habilidades del futuro vimos que la Inteligencia Aprendedora era una de ellas. Vivir en constante aprendizaje es una cuestión de sobrevivencia en el mundo hiper conectado e informatizado que vivimos hoy.

La crisis del coronavirus obligó a muchas empresas a cerrar fuentes de empleo. Muchas personas se quedaron sin trabajo y muchos emprendedores también se vieron en la necesidad de cerrar sus negocios.

La ley de la naturaleza se aplicó una vez más y aquellos que consiguieron ser resilientes, adaptarse y aprender rápidamente, fueron los que de alguna manera atravesaron la crisis sin mayores sobresaltos. 

La pandemia nos demostró que actualmente ser el “dueño del conocimiento” ya no es tan importante, como lo era antes. Actualmente es más valioso tener la capacidad de aprender rápido y de ir atrás de la información. Ya que el conocimiento es estático, por su vez el aprendizaje es dinámico. Bajo esta premisa nuestra sed de conocimiento tiene que ser infinita.

8. Esta crisis no fue la primera y con seguridad no será la última

Hoy por hoy solo podemos tener certeza que esta crisis no fue la primera y con seguridad que no será la última. Nadie predijo o tuvo la capacidad de anticipar la pandemia del coronavirus.  Infelizmente es difícil o casi imposible anticipar eventos de este tipo.

Vimos a potencias mundiales como Estados Unidos y países de Europa ser fuertemente impactados por no estar debidamente preparados para encarar una crisis sanitaria de esta magnitud. 

Además, debemos recordar que esta no es la primera pandemia en la cual prácticamente todo nuestro globo terráqueo se ve afectado por un virus que acaba con la vida de millones de personas. En 1918 nuestro mundo sufrió con la Gripe Española, la misma se cobró la vida de entre 20 a 40 millones de personas.

Por otro lado también ya hemos atravesado por crisis económicas y financieras de escala global. Por citar algunas tenemos la Gran Depresión de 1929 que duró casi una década y causó que muchas economías se desplomaran.

Y para finalizar con nuestro recordatorio de crisis vamos a mencionar una más reciente, la crisis financiera de 2008 conocida como Burbuja Inmobiliaria. Se inició a raíz de una crisis hipotecaria en Estados Unidos, la cual hizo que bolsas del mundo entero se derrumbaran. Por consecuencia se generó una crisis profunda de liquidez, causando una crisis alimentaria global y una crisis económica a escala internacional. 

Nuestro objetivo no es finalizar este post con un tono apocalíptico . Todo lo contrario, estas lecciones financieras buscan, por un lado, transmitir que es necesario estar preparados para eventuales crisis. Y también debemos reforzar que esta crisis va a pasar como lo hicieron todas las otras.

Con seguridad que la pandemia dejará consecuencias severas y un “Nuevo Normal” se viene configurando. Debemos ser resilientes e intentar salir más fortalecidos de todo esto. 

Nota: Espero que este post haya sido de tu agrado. Toma en cuenta estas lecciones y si ya aplicas alguna de ellas, excelente. El próximo paso es ayudarnos compartiendo este post para que otras personas puedan aprender con nuestros mensajes y que no tengan la necesidad de decir “Como no supe antes” en la próxima crisis que no sabemos cuando llegará.