Seguros ¿Son una necesidad o no?

El día de hoy hablaremos de los seguros. Las ventajas y desventajas de tenerlos y si valen la pena desde un punto de vista financiero.

Solo para estar todos en la misma página: Según Economipedia, un seguro es un contrato que permite cubrir una contingencia. Esta contingencia puede estar cubierta parcialmente o en su totalidad, dependiendo del contrato, por la empresa aseguradora. Para ello el asegurado paga un monto de dinero ya sea mensual, trimestral o anual y normalmente a este monto de dinero que paga el asegurado se le llama “prima”.

Es decir, el asegurado realiza un pequeño pago (por lo general mínimo con respecto a lo que se asegura) por el que no se recibe nada. Sin embargo si sucede una contingencia, la empresa aseguradora cubre con los gastos dentro de los límites pactados. 

Hay seguros a la personas (Como ser seguro de salud y seguro de vida) y seguros al patrimonio (Seguro de casa, seguro de automóvil, entre otros). Hoy cubriremos los dos más comunes en cada caso. 

Seguros de Salud

Este seguro es uno de los más comunes y es aquel que cubre nuestros gastos médicos en caso de que caigamos enfermos o tengamos algún accidente. Es bueno recalcar que mientras más jóvenes seamos a la hora de asegurarnos, menor será la “prima” a pagar. 

A la vez, tomar en cuenta que por lo general la “prima” a pagar de una mujer es más cara que la “prima” a pagar de un hombre. Esto se debe a que por lo general, el seguro de salud de una mujer, incluye el tema de maternidad.

Financieramente hablando, conviene tener seguro de salud. La verdad que por más sano que uno sea, nadie está libre de tener un accidente y después rápidamente quedar en la quiebra por pagar los gastos médicos. Mientras mejor sea el seguro de salud, estaremos más tranquilos en caso de alguna eventualidad.

Seguro de Vida

Este seguro deja cubierto financieramente a nuestros herederos o dependientes en caso de que fallezcas. Es decir, si por alguna razón tu te mueres, tu esposa e hijos recibirán una indemnización económica.

Adicionalmente, por lo general los seguros de vida tienen la opción de devolverte la “prima, más intereses ganados” al final de una cantidad de años si es que no falleces. Por lo tanto, contar con un seguro de vida puede ser una buena forma de ahorro.

Al igual que el seguro de salud, toma en cuenta que mientras más antes te saques un seguro de vida, menor será la prima a pagar y mayor la cantidad de dinero que te devolverán al final de un periodo determinado, claro caso que no fallezcas. 

Financieramente hablando, hay otras formas más rentables para asegurar a tu familia. Sin embargo, tienes que hacerlo tú mismo, ser responsable y consistente. Por ejemplo, puedes comenzar a invertir en la bolsa de valores o comprar bienes raíces y con un buen testamento, en caso de que te suceda algo, dejas cubierto a tu familia.

Obviamente la ventaja de los seguros de vidas es que desde el día 1, tu familia está asegurada con una cantidad de dinero elevada. Sin embargo, si vas por la opción de hacerlo tu mismo, tu familia estará asegurada por el valor de tu patrimonio y al comienzo puede que no sea mucho.

Al final la decisión es de cada uno, ya sea que asegures a tu familia con un seguro de vida o creando patrimonio. La clave está en empezar cuanto antes.

Seguros de Casas

Este seguro cubre alguna eventualidad con respecto a tu casa. Estos pueden ser como incendios, robos, terremotos, etc. La verdad que la probabilidad de que alguno de estos eventos sucedan es bastante baja. Por lo tanto, la prima a pagar es baja también.

Toma en cuenta que si te compraste tu casa con crédito bancario y todavía le debes al banco, es muy probable que el banco por contrato te exija que tengas un seguro para tu casa donde esté cubierta al 100% contra toda eventualidad.

Financieramente hablando, la verdad que la probabilidad de que alguna vez te suceda alguna eventualidad donde pierdas el 100% de tu vivienda es bastante baja. Por lo tanto, te aconsejo que si aseguras tu casa, lo hagas por un monto mucho menor. Así estás cubierto contra el 90% de las eventualidades y no pagas una prima muy alta

Seguros de Auto

Este seguro tal como lo dice su nombre, cubre alguna eventualidad con tu automóvil. Por lo general los seguros de autos cubren tanto el vehículo como los costos médicos en caso de que haya habido lesionados en el accidente.

Al igual que un seguro de casa, si compraste tu vehículo con crédito bancario y todavía le debes plata al banco, tendrás que tener un seguro de vehículo donde te cubran el 100% del vehículo.

Toma en cuenta que en la mayoría de los seguros de vehículos, te cubren sólo el 80% en caso de robo y el monto que te devuelven siempre es el valor comercial de tu vehículo (es decir ya depreciado) y adicionalmente descontando los impuestos. Por lo tanto, tener tu vehículo al 100% asegurado no tiene mucho sentido. Además la probabilidad de tener un accidente donde pierdas el 100% del vehículo es baja. 

Desde un punto de vista financiero, te conviene tener seguro de automóvil, ya que la probabilidad de que alguna vez tengas algún accidente de auto es alta. Sin embargo, tal como vimos antes, no deberías asegurar tu vehículo al 100%. 

Mi consejo sería que cada año analices el valor comercial de tu vehículo. Es decir el valor por el cual lo venderías en ese momento y la gente estaría dispuesta a pagarte. Y a ese valor lo multipliques por un 80%. Con eso deberías de estar cubierto para un 95% de accidentes y tu prima no te sale muy cara.

Conclusiones

Tal como vimos, los seguros son importantes para protegernos y proteger nuestro patrimonio en caso de alguna eventualidad. En caso de algún accidente, enfermedad o eventualidad, podemos quedar en la quiebra si no estamos protegidos como corresponde.

Es importante asegurarnos y asegurar a nuestras familias, obviamente sin exagerar, ya que al final de cuenta, las eventualidades llegan de repente. La verdad que lo mejor que nos puede pasar es que paguemos en vano. Eso significa que tuvimos un año sin accidentes y sin enfermarnos. 

Espero que este artículo te haya llegado en el momento justo y antes que digas “como no supe antes”. Que hayas podido reflexionar un poco sobre los seguros en general y si es que todavía no tienes ninguno, especialmente el de salud, que te consigas uno cuanto antes. Recuerda que al final de cuenta, lo mejor que te puede pasar es que pagues en vano. 

Coméntanos qué piensas sobre los seguros en general. ¿Tú ya tienes alguno?. Ayúdanos compartiendo este mensaje para que así menos personas digan “como no supe antes”.

¡Gracias!